Según
el reportaje titulado “La CIA, financiada por el Narco”, la agencia desarrolla
actividades ilícitas con recursos del narcotráfico, con la anuencia de altos
mandos policiales chilenos, para conspirar contra el Gobierno ecuatoriano
La revista mexicana Proceso
denunció que la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos (CIA, por
sus siglas en inglés) desarrolla una “vasta operación de transporte de droga”
en la frontera de Bolivia y Chile, y destina las ganancias a desestabilizar al
Gobierno ecuatoriano de Rafael Correa.
Según el reportaje titulado “La
CIA, financiada por el Narco”, la agencia desarrolla actividades ilícitas con
recursos del narcotráfico, con la anuencia de la Policía de Investigaciones de
Chile (PDI), de los altos mandos policiales y del exministro de Interior
Rodrigo Hinzpeter, actual Ministro de Defensa chileno.
El trabajo cita como una de sus
fuentes al periodista chileno Patricio Mery, quien denuncia que las autoridades
chilenas trafican unos 300 kilos mensuales de cocaína boliviana a través del
fronterizo paso Colina, en la provincia de Chacabuco (centro-norte).
Aunque hace referencia a ex altas
autoridades civiles y policiales chilenas, el reportaje también menciona la
trayectoria antiimperialista de Correa, que incluye el cierre de la Base
Militar norteamericana de Manta en suelo ecuatoriano, y recuerda el trabajo
sucio de la CIA en el escándalo Irán-Contras.
Mery también fundamenta sus
acusaciones en declaraciones del exinspector de la PDI, Fernando Ulloa, quien
le reveló que en febrero de 2011, cuando estaba a punto de interceptar el
ingreso a Chile de un cargamento de cocaína, sus jefes le impidieron actuar, ya
que el cargamento estaba siendo resguardado por agentes policiales.
Adicionalmente, en 2011, Ulloa
descubrió que desde 2009 entraban a Chile entre 200 y 300 kilos de cocaína
mensuales. “La droga venía en cajas de televisores transportadas en camiones.
Quiso detener las cargas, pero fue cambiado a un lugar alejado”, reseña el
artículo.
También en 2011, Ulloa habría
entregado a Hinzpeter una carpeta con copias de los documentos y correos
electrónicos que comprobaban sus denuncias y los nombres de los implicados en
el tráfico de la droga y en la red de protección.
Acto seguido, Hinzpeter le pidió
a Ulloa guardar silencio y le aseguró que en cuatro días solucionaría el
problema. Sin embargo, al no proceder la denuncia, Ulloa decidió comunicar esos
hechos a Mery.
De acuerdo con Mery, la operación
encubierta está vinculada con la detención del oficial en retiro de la armada
Diego Sáez Luna, enlace entre la CIA y la armada chilena, y busca
desestabilizar al gobierno de Correa.
En octubre pasado, el ex
embajador británico en Uzbekistán, Craig Murray, reveló que la CIA invertirá 87
millones de dólares para desestabilizar a Correa, antes de las elecciones de
febrero de 2013.
El informe de Murray señala que
los fondos provendrán de las arcas del Pentágono y que servirán para “sobornar
y chantajear a los medios y a funcionarios oficiales”.
“Se esperan escándalos mediáticos
y salpicaduras de corrupción contra el gobierno de Correa en las próximas
semanas”, aseguró el exdiplomático.
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