Medios de Desinformación Masiva
(Los Principales Propagadores de Propaganda y Fake News)
Quien todavía cree en los Medios de Desinformación Masiva (conocidos mundialmente como Medios de Comunicación Masiva o Medios de Comunicación de Masas o Mass Media) tiene un grave problema con su cerebro.
Conocer que todavía hay seres humanos que desayunan, almuerzan y meriendan acompañados de estos Medios es algo asombroso, patético y desalentador.
Es triste observar como familias enteras, incluso con sus hijos pequeños, miran atontados estos Medios, sin pestañear, sin moverse, babeando, adormilados, embrutecidos.
Es increíble que a pesar de que existen miles de pruebas, datos, estudios, investigaciones, ejemplos muy claros y todo tipo de informes, mostrando que estos Medios son pura propaganda, que solo sirven a los poderosos y a la élite (ellos son sus dueños), que engañan al pueblo (naciones, estados, países), que mienten, falsifican y distorsionan la realidad, que embrutecen y fueron creados para lavar el cerebro, hay hogares enteros que los toman como palabra santa y los apoyan a ultranza.
¿Por qué no conocen estas personas todas estas pruebas, datos, investigaciones, etc.? Fácil, porque miran y creen en los Medios. Han crecido con ellos y morirán con ellos, hasta su nombre, una vez fallecidos, aparecerá en uno de estos Medios.
Creen que existen MUCHOS Medios, creen que al cambiar un canal, emisora, o de lectura, están
cambiando de fuente de información y que obtendrán mayor conocimiento y sabiduría. Lo que desconocen es que solo 6 (seis) grupos controlan a todos los Medios del mundo. Creen que tiene opción a elegir, pues están completamente equivocados. La opinión pública, las noticias, la «realidad» proviene de solo 6 grandes compañías que son dueñas de todos los Medios en el planeta. Tengo muchos canales —dice un despistado dado de sabio—, no sabe que todos son la misma basura con diferente nombre.
Aquí un claro ejemplo (de los miles que hay) de como los Medios manipulan a las masas, engañan, encubren, amenazan, y mienten. Este no es un caso burdo como el de mentir que un presidente tiene apoyo de su pueblo, o de que unos pocos hicieron huelga, o que un ente tiene la culpa de todos los males. Aquí hablamos del encubrimiento de un pedófilo a gran escala, de un millonario pedófilo que tiene vínculos directos con esa élite dueña de los Medios, con la asquerosa realeza, con los grandes magnates, con los grandes empresarios, con toda esa escoria del Jet set, con políticos de pacotilla marionetas de los poderosos.
Los Medios encubren el abuso a menores, a niños, a adolescentes, encubren la cloaca en la que viven los poderosos. El soso espectador de noticias cree que esto no existe y que todos los ricos son buenos y hay que ser como ellos para salvar el mundo, porque estos mismo Medios así lo dicen y así lo hacen creer. El espectador de noticias es un zombi descerebrado el cual ha sido lavado el cerebro. Duro decirlo y creerlo, pero es la pura verdad.
Y si preguntamos a uno de estos tontos que creen en los Medios (y que creen que saben y conocen porque ven los Medios) ¿quien fue Jeffrey Epstein? Les apuesto a que no lo saben, ni siquiera lo han oído. Pero según ellos, están muy bien informados porque vieron el noticiero del medio día.
El caso Jeffrey Epstein pudo haber sido el caso más grande para destapar toda la podredumbre de la élite y sus lacayos. Si los Medios no jugaban su papel siniestro (como siempre lo hacen), junto al pedófilo Epstein hubiera caído gran parte de la realeza mundial, de los presidentes y ex-presidentes de Estados Unidos y otros países, banqueros, empresarios, actores y actrices, todo este mundo podrido y asqueroso que a los que ven la televisión les venden como lleno de glamour y sofisticado.
Señores y señoras, este caso saltó a mediados del año 2019, sí, hace pocos meses atrás. ¿Alguien lo supo? Y si lo sabían, ¿conocen la verdad? o las mentiras contadas por los Medios de su preferencia.
No quiero alargar este escrito contándoles los detalles del caso Epstein, ustedes lo pueden averiguar (obviamente no consultando en los Medios). Palabras claves para la búsqueda: Jeffrey Epstein; Jeffrey Epstein falso suicidio; Jeffrey Epstein pedófilo; Jeffrey Epstein Lolita Express; Jeffrey Epstein Isla de la Orgía o Isla del Pecado; Jeffrey Epstein islas Vírgenes Norteamericanas; Jeffrey Epstein Bill Clinton; Jeffrey Epstein Donald Trump; Jeffrey Epstein Ghislaine Maxwell; Jeffrey Epstein príncipe Andrés de York; Jeffrey Epstein Harvard; Jeffrey Epstein Stephen Hawking; Jeffrey Epstein Mossad Robert Maxwell
El vídeo que estará al final de este artículo fue realizado por Project Veritas (por favor también revisar este Proyecto). Fue entregado por un informante anónimo dentro de la cadena de noticias ABC. En él podemos ver y escuchar una conversación -con el micrófono abierto- entre la presentadora Amy Robach de ABC y su productor, a finales de octubre.
Amy Robach: Yo tenía la historia hace tres años. Tenía la entrevista con una víctima de Epstein, Virginia Roberts (Giuffre). No la pudimos poner al aire. Primero me preguntaron quién era Jeffrey Epstein, nadie lo conoce, esta es una historia estúpida. Luego el Palacio (la Reina de Inglaterra) se enteró que teníamos todo el testimonio en contra del príncipe Andrés y nos amenazaron de diferentes maneras. Nos preocupaba que no pudiéramos entrevistar a Kate y Will, esto también anuló la historia. Y luego también Alan Dershowitz (abogado y político estadounidense) se vio implicado por lo de los aviones. Virginia Roberts me lo contó todo. Ella tenía fotos, ella tenía todo. Estuvo escondida por 12 años, nosotros la convencimos para que salga a la luz, le convencimos que converse con nosotros. Era increíble lo que teníamos, Bill Clinton, lo teníamos todo. Intenté sacarlo por tres años y no tuve resultados. Ahora todo está saliendo y es como que si fueran nuevas revelaciones. Yo lo tenía todo, estoy muy enojada ahora. Cada día me pongo más enojada porque lo que teníamos parecía algo no real. Teníamos a otras mujeres que respaldaban. Brad Edwards (el abogado de Virginia Roberts) me decía hace tres años que llegará el día, cuando nos demos cuenta que Jeffrey Epstein era el más prolífico pedófilo que este país (EEUU) haya conocido. Lo tenía todo tres años atrás.
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La entrevista no fue publicada, recibieron amenazas desde el Palacio de Buckingham, recibieron amenazas de Alan Dershowitz (que era abogado de Epstein). Prefirieron proteger a la élite (obvio) y no a todas esas mujeres que estaban siendo abusadas por los poderosos. Hay que recordar que durante estos tres años, Epstein estaba libre y haciendo de las suyas.
La entrevista todavía no ha sido publicada ¿A quién protegen? ¿Por qué no la publican?
Amy Robach: ¿Si creo que fue asesinado? Cien por ciento, lo creo. ¿Quieres saber porqué? Porque toda su vida la pasó chantajeando a la gente. Hubo muchos hombres en esos aviones, muchos hombres que visitaron la isla, muchos hombres poderosos que visitaron ese departamento. Cuando se conoció que se había suicidado en su celda... lo supe de inmediato. Y nos hicieron creer, cuando intentó ese primer «suicidio» dos semanas antes. Pero sus abogados dijeron que su compañero de celda lo agarró del cuello, todo fue para plantar la semilla y luego... Realmente lo creo, realmente lo creo. Sobre Ghislaine Maxwell también teníamos muchas cosas. Es tan sorprendente escuchar a la gente pronunciar su nombre, Dios, lo teníamos todo. Y todo el mundo era como que, quién es ella, a quien le importa, me seguían diciendo, a quien le importa. Ella lo sabe todo. Ella debería tener mucho cuidado, ella era la que reclutaba a todas estas chicas. Ella debería cuidar su espalda, debería rodearse de guardias.
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¿Quién mató la historia de Epstein en ABC Noticias y por qué?
James Goldston es el presidente de ABC Noticias, ¿qué sabe él, cuándo lo supo?
AQUÍ EL VIDEO:
«La televisión tenía un
efecto disociativo sobre las capacidades mentales y hacía que la gente fuera menos
capaz de pensar de forma racional. Los espectadores, conforme van habituándose a
ver seis horas o más de televisión al día, ceden el poder de razonar a las imágenes y
los sonidos que salen del televisor».
-Lonnie Wolfe
¿Alguna vez ha prestado atención a la forma de hablar que se utiliza en los
informativos? No, ¿verdad? En realidad, todos los informativos del mundo occidental
siguen la misma pauta lingüística: verbos simples, ristras de nombres y muy pocas
frases largas. Frases cortas, vocabulario sencillo. En otras palabras, citas jugosas. «El
presidente no va a presentarse a la reelección», dice el locutor, «les daremos más
detalles dentro de media hora». Esto también es deliberado. Por medio de la lengua,
de su belleza y su complejidad, «el hombre transmite las ideas y los principios de su
cultura de una generación a otra». La jerga de la televisión es aristotélica, se limita
a nombrar los objetos como si estuvieran en un universo fijo, finito: hombre, perro,
delincuente, presidente, coche, bomba, economía, malo, bueno. «No está en marcha
el pensamiento creativo, no hay ningún intento de estimular el intelecto, sino de
imprimir una imagen en el cerebro de la persona». Y eso es lo que se llama lavado
de cerebro. Sin embargo, el lavado de cerebro a través de la televisión no es algo que
suceda de la noche a la mañana, sino más bien es un efecto acumulativo que se da a
lo largo de un período de tiempo y que consigue cambiar la forma de pensar de
nuestra sociedad. ¿No me cree? Pues mire a su alrededor y piense qué pasaba una
generación atrás.
-Daniel Estulin
La generación que cuenta con la escala de valores morales más sólidos de toda la
historia de Estados Unidos es la que luchó en la Segunda Guerra Mundial. Sus
integrantes nacieron antes de que llegara la televisión. Tenían los cerebros más
difíciles de lavar. De modo que fueron sus hijos, los del baby boom, quienes se
convirtieron en el objetivo de los lavacerebros. De hecho, con la llegada de la
televisión, los hijos de esa generación han sufrido toda la vida el lavado de cerebro.
Recordemos cuál era la meta de los lavacerebros: volver más infantil a cada
generación, más animal, más amoral, y por lo tanto más fácil de controlar. El mundo
del que formamos parte hoy en día es más convencional, menos concientizado, más
sensacionalista y más despectivo. Todo el empuje del pensamiento moderno se ha
empleado en reducir el ámbito de la responsabilidad moral individual. La conducta
humana se ve cada vez más como el producto de fuerzas impersonales.
No podía ser de otra forma. «Tenemos unos padres que fueron educados por la
televisión, que han criado a unos hijos que han sido educados por la televisión, unos
hijos que ahora empiezan a tener hijos a su vez; tres generaciones consecutivas
sometidas al lavado de cerebro de la televisión y que no recuerdan haber vivido algo distinto».
-Daniel Estulin
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