(1) http://obligatoriorecordar.blogspot.com/2013/03/quien-mato-hugo-chavez-1.html
Daniel Hopsicker
La Conexión Cubana (¿y el Vaticano?)
Chávez murió en Cuba en vísperas de Año Nuevo, dicen otros, señalando intencionadamente, con toda seriedad, que el jefe embalsamador del Vaticano estuvo en Cuba la primera semana de Enero.
Luego, el día antes de que Chávez muriera, dos agregados del ejército estadounidense fueron expulsados alegando que estaban tratando de desestabilizar a la nación. El vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos Patrick Ventrell negó las acusaciones de que Washington estaba intentando desestabilizar a Venezuela.
La insinuación de que los Estados Unidos metieron la mano en la enfermedad de Chávez, era “absurda”, comentó.
Lo que no es absurdo, dicen los observadores locales, es que, de pronto, mucho dinero está en juego.
Chávez ha sido unido con los Castro -Fidel y Raúl- por los últimos diez años. Él les confiaba con todo detalle de su seguridad personal para que manejen la policía política, la mayor parte de los activos estratégicos del país, y proveyendo a Cuba con un subsidio estimado al año de $10 billones.
Se trata de un subsidio, observadores de la oposición oscuramente sugieren, que los cubanos no quiere desprenderse de buena gana.
Así, preparando el escenario para el debate feroz actualmente en curso...
Amigo, hay mucho cáncer rondando por ahí
El sucesor de Chávez elegido cuidadosamente, Nicolas Maduro, dijo que el presidente ha sido “atacado” por los “enemigos históricos” del país, y llamó a una investigación científica. Maduro llegó más allá y llamó a la muerte de Chávez un asesinato, según el The Washington Post.
El mismo Chávez had earlier suggested (ha insinuado anteriormente) que los Estados Unidos podrían haber “inventado la tecnología para esparcir el cáncer”. Y alertó a sus aliados los presidentes de izquierda Evo Morales de Bolivia y Rafael Correa de Ecuador, que ellos podrían ser los siguientes blancos.
El puntualizó que cinco grandes líderes de Sudamérica, incluyéndose, todos tuvieron cáncer alrededor del mismo tiempo. El ex presidente de Brasil Luiz Inacio Lula da Silva, fue diagnosticado con cáncer de garganta, y la presidenta actual de Brasil Dilma Rousseff también fue atacada por esta enfermedad.
La presidenta argentina Cristina Fernandez de Kirchner tuvo cáncer de tiroides. El presidente Paraguayo Fernando Lugo, 60, fue diagnosticado con linfoma en agosto de 2010.
Y ahora… fue el turno de Chávez.
Nada de disparates. En serio.
Disparates, dijeron varias organizaciones de noticias de Norteamérica. ¿La mejor evidencia de que la CIA no estaba involucrada? La lógica.
“No es efectiva,” Kel McClanahan, un abogado basado en la seguridad nacional de D.C., que ha estudiado los hábitos de la CIA por años, told Foreign Policy (dijo a Foreign Policy). “Mientras unos tipos de cáncer pueden ser intencionalmente inducidos, toman años en matarte. Si una agencia de inteligencia te quiere muerto, te quiere muerto ahora.”
“Tú no puedes dar cáncer a una persona” declaró el presidente de la Sociedad Americana del Cáncer Elmer Huerta, un oncólogo e investigador del cáncer. “Eso es imposible. Envenenar a alguien con un químico toxico para que desarrolle el cáncer requeriría “un largo tiempo de exposición” con dosis constantes”
Y los periódicos de Sudamérica están citando al oncólogo argentino, Luis Romero Acuña, que está de acuerdo, llamando a la teoría de la conspiración “una locura.”
No es locura, doctor. La locura se cobra su peaje
No, doctor. No es “locura.” Sé algo de primera mano acerca del cáncer y la CIA, así como dos autores que han escrito más extensamente sobre esto, de lo que yo lo he hecho.
En el libro "Me and Lee" (“Yo y Lee”) Judyth Vary Baker afirma que trabajó en un programa a inicios de los 60 para infectar con cáncer a Castro.
Un prodigio científico, Judyth Vary Baker solamente tenía 19 cuando fue manipulada para que se uniera al proyecto, fuera de todo registro, de la CIA donde ella conoció a Lee Harvey Oswald, en Nueva Orleans mientras este se hacía pasar por activista pro-Castro con el fin de ganar credibilidad en el gobierno Cubano.
El proyecto, ella dijo, era dirigido por David Ferrie para el Dr. Alton Ochsner, jefe de la Clinica Ochsner en Nueva Orleans. Para el final del verano, ellos habían desarrollado una cepa de cáncer “galopante” y la habían probado en monos así como en ratones. Todo lo que faltaba era probarlo en humanos.
Ed Haslam, cuyo padre trabajó bajo Oschner en la Universidad de Tulane, está de acuerdo. Él usó el asesinato de un investigador del cáncer conocido nacionalmente en 1964 para montar el escenario para una fascinante exposición de médicos profesionales metidos en operación encubiertas del gobierno en su libro, "Dr. Mary’s Monkey". (Los Monos del Dr. Mary)
El libro ofrece evidencia que prueba que el fiscal del asesinato de JFK Jim Garrison estaba correcto cuando dijo que el agente de la CIA David Ferrie estaba experimentando con virus que causen el cáncer para la CIA. El objetivo era matar a Fidel Castro con cáncer.
Mi interés en David Ferrie era porque él era, siempre, primero y más importante un piloto, que personalmente reclutó al más famoso piloto de la historia de la CIA, Barry Seal. Seal fue el centro de mi libro, “Barry & the boys.” (“Barry y los muchachos”)
Cuando él reclutó a Barry Seal, Ferrie estaba manejando una flota de cinco DC afuera del Aeropuerto de Lakefront para la CIA. The Southern Air Wing (La Ala de Viento del Sur), si es que gustan. Ferrie murió-fue asesinado, lo más creible hoy en dia-en 1967.
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